Por:Víctor Manuel Jiménez Mora.

El genio Mario Moreno Cantinflas, emancipador nacional de la sonrisa y carcajada, promotor del buen humor que se requiere para vivir, la alegría que necesitamos para fortalecer nuestro paso por la vida.

Hoy citamos a quien a través de su voz inconfundible nos transporta a su mundo fabuloso de la reflexión y de la decencia en sus películas.

“Tan genio fue, que hasta Charles Chaplin lo admiró y dijo que él era el mejor cómico de todos los tiempos”.

En esos tiempos dorados, la gran señora del bolero Amparo Montes, triunfaba con su canción “Nadie”, allá por el año de los 50 y que Don Emilio Azcárraga Vidaurreta, la catalogó como la última gema de la bella Época del bolero, al tiempo que Don Beto Barney la contrató varias veces en sus centros nocturnos en Acapulco como el "BUM BUM", y quien sin duda coordinaba todo ello es Armando Carmona Quezada, respectivamente, y firmemente atestiguaban las visitas de estrellas y celebridades internacionales, así como mandatarios como el ex presidente Miguel Alemán, padre turístico de Acapulco, y claro, “Cantinflas”, llevó la estampa de la Perla del Pacífico a quererla visitar a través de su película “El Bolero de Raquel”.

Don Mario Moreno, se paseaba por el Club de Yates, el Hotel Caleta, El Mirador, El Presidente y con el portentoso Hotel Villa Vera donde firmó el acto de amor entre el director de cine, su gran amigo Mike Todd y Elizabeth Taylor en 1957. También con esta pareja de fama mundial compartió exitosos momentos como este premio del cine alemán, Kim Novak, Frank Sinatra, Dean Martín, el grandioso Samy Davis Junior y la superviviente actriz Sza Sza Gabor, quien vive en Londres, y quien por cierto, es la última Diva del Cine de Oro de Hollywood, y con ella se cierra la puerta de una época de la que tanto hablamos y seguiremos recordando.

La verdad, me quedo corto con tantas cosas que hizo Mario Moreno "Cantinflas", puesto que hasta el comediante inglés Charles Chaplin, lo llamaba “El Genio”. Póngase a pensar lector, hasta dónde fueron los niveles de un hombre que amó tanto a Acapulco, que la belleza natural fue el escenario perfecto, apacible, carismática y su sol acaricia la faz tostándola con las aguas dulces de un paraíso, que, a muchos nos vio nacer, empero, que proyectó los sueños de muchos de querer estar en esta gran riviera, a través de la gran fotografía en la pantalla chica y grande, a través de sus películas de “El Bolero de Raquel”, y por qué no decirlo, a proyectar a la ciudad mineral de Taxco de Alarcón, en su otro filme de la exitosa internacionalmente llamada “Pepe”.

Esta Leyenda de Acapulco, así como muchos otros personajes, se quedaron hipnotizadas por él en este espacio orgánico, para vivir su existencia recurrentemente, durante sus visitas a nuestro puerto.

“Cantiflas”, quien naciera en la Ciudad de México el 12 de agosto de 1911, promovió México a través de la bondad de su gente.

Finalmente, haga arte con sus palabras y cultura de amor por la vida en todas sus formas, para que siga embalsamando su espíritu y a los que dependen de usted, porque al menos para mí, en este momento, Acapulco, es más que todas mis razones.